Comprar un departamento es una gran inversión, por esta razón es aconsejable que tengas en cuenta factores como el ahorro de luz para reducir gastos tras la adquisición y estabilizar tu situación financiera. Tomar medidas de ahorro también evitará que tus facturas aumenten con el tiempo y te permitirá contribuir al cuidado del planeta mediante un consumo responsable de energía.
Con el fin de lograr este objetivo, en el siguiente artículo te damos 10 consejos para ahorrar luz. Adopta estas prácticas y ten un mayor control sobre tus gastos a la vez que disfrutas de un hogar más sostenible.
1. Utiliza focos led
Los focos led representan una opción altamente eficiente y respetuosa con el medio ambiente en comparación con las bombillas incandescentes y fluorescentes. A pesar de que su costo inicial puede ser ligeramente superior, sus beneficios a largo plazo son notables.
Hoy en día, estos focos son una de las alternativas ecológicas favoritas de muchas personas, ya que consumen menos energía que las fuentes de luz tradicionales, lo que se traduce en menos reemplazos y, en consecuencia, en menores gastos futuros.
Además de su extraordinaria eficiencia energética, los focos led proporcionan una calidad de luz excepcional y están disponibles en una amplia gama de tonos y colores para adaptarse perfectamente a tus necesidades de iluminación. Son versátiles y pueden usarse en lámparas, apliques de pared, plafones y cualquier otro tipo de luminaria.
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2. Desconecta los dispositivos electrónicos que no uses
¿Sabías que los aparatos electrónicos que están apagados siguen consumiendo energía? Este fenómeno se conoce como “consumo fantasma” o “modo standby” y puede representar un porcentaje significativo de tu factura de electricidad.
Para contrarrestar este derroche de energía es imprescindible desconectar los dispositivos electrónicos cuando no se estén utilizando. La mejor forma de ahorrar luz con esta técnica es adquirir regletas con interruptores, ya que te puede permitir apagar varios aparatos de forma sencilla y práctica con solo presionar un botón.
Por otro lado, es fundamental que te asegures de apagar dispositivos como la computadora, el televisor, las consolas de videojuegos y los equipos de sonido antes de irte a dormir o de salir de casa. ¡Este sencillo hábito puede suponer un gran ahorro de energía!
3. Limpia las luces de tu refrigerador
La iluminación interna de tu refrigerador te ayuda a encontrar los alimentos que necesitas, pero si las luces están cubiertas de polvo o suciedad, es probable que consuma mucha más energía para iluminar el interior. Quizá esta tarea no forme parte del mantenimiento habitual de tu refrigerador, pero una de nuestras principales recomendaciones para ahorrar energía es limpiar las luces al menos una vez cada tres meses.
Usa un paño suave y húmedo para limpiarlas y eliminar cualquier acumulación de suciedad que pueda dificultar su funcionamiento. Comprueba también que la junta de la puerta está en buen estado, ya que un sellado adecuado evita las fugas de frío y reduce la carga de trabajo del motor para mantener la temperatura interior correcta.
4. Limpia o sustituye los filtros de aire
Los sistemas de aire acondicionado, calefacción y ventilación suponen una gran parte de las facturas de electricidad; por lo tanto, es crucial limpiarlos y darles el mantenimiento adecuado para mejorar la eficiencia energética de tu hogar.
Los filtros de aire en mal estado o sucios pueden dificultar el flujo de aire, obligando a los sistemas a trabajar más y, como resultado, consumir más energía. Haz un esfuerzo por revisar cada cierto tiempo estos filtros y considera la posibilidad de sustituirlos cuando observes una deficiencia en su rendimiento.
5. Instala un temporizador para tu terma o calentador de agua
Para evitar que la terma esté siempre encendida y gastando energía, puedes instalar un temporizador para que el equipo se encienda y caliente el agua solo cuando lo requieras. Aprovecha las cualidades de este aparato y programa diferentes horarios según tus necesidades.
Por las mañanas, por ejemplo, puedes programar el calentador de agua para que se encienda una hora antes de que te bañes y se apague por la tarde, cuando estés en el trabajo o fuera de casa. Esta sencilla medida puede reducir considerablemente el consumo de energía del calentador de agua.
6. Instala interruptores inteligentes
Los interruptores inteligentes son dispositivos ecológicos que favorecen el ahorro de luz. Esta innovación tecnológica permite controlar las luces de tu hogar de forma remota a través de una aplicación móvil. Más allá de ofrecer comodidad, son herramientas útiles para evitar el derroche de energía.
Imagina que sales de casa y olvidas apagar las luces de la cocina. En ese momento, basta con utilizar tu celular para apagarlas al instante en lugar de dejarlas encendidas todo el día.
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7. Haz que la batería de tu celular dure más
Anímate a seguir distintos tips tecnológicos para que la batería de tu celular dure más y no tengas que cargarlo tan seguido. Algunos trucos sencillos que te recomendamos son ajustar el brillo de la pantalla, cerrar las aplicaciones abiertas en segundo plano, desactivar el wifi y el bluetooth cuando no los uses y reducir el tiempo de espera del bloqueo automático.
Aparte de eso, puedes recargar la batería justo antes de que se agote. No dudes en hacer lo mismo con las laptops, tabletas, auriculares, altavoces y desenchufa los cargadores en cuanto las baterías de tus aparatos electrónicos estén completamente cargadas.
8. Sé eficiente al cocinar
La cocina es otra zona de tu hogar en la que puedes ahorrar luz de forma eficaz. Procura utilizar electrodomésticos eficientes, como hornos modernos que usen tecnología de inducción o convección, de manera que no solo ahorres energía, sino que también cocines más rápido.
En cuanto a las ollas y sartenes, asegúrate de usar las tapas adecuadas al cocinar para que no se escape el calor y utiliza la cacerola adecuada en el aro correcto. Esto puede marcar una gran diferencia, acelerando los tiempos de cocción y consumiendo mucha menos energía.
9. Abre la llave de la ducha solo cuando sea necesario
A la hora de tomar una ducha, es inevitable que tardemos más de lo esperado. Algunas personas aprovechan este momento para relajarse, mientras que otras usan distintos productos para el cuidado de la piel o el cabello que tardan mucho en aplicarse.
Este mal hábito puede provocar una gran pérdida de energía, especialmente si tienes una ducha eléctrica y un medidor de agua. Corrígelo cerrando la llave del agua mientras te enjabonas o aplicas productos especiales, así podrás tomarte tu tiempo y relajarte sin preocupaciones.
10. Evita usar la secadora constantemente
Somos conscientes de que la secadora puede ser una ventaja cuando tienes prisa; sin embargo, independientemente de la cantidad de ropa que pongas en ella, consumirá mucha energía.
En su lugar, te recomendamos no usarla tan a menudo. Si el número de prendas que lavas es relativamente pequeño, puedes utilizar la función de presecado de la lavadora o tender la ropa al aire libre para obtener los mismos resultados y reducir el consumo de electricidad.
¡Ahora ya sabes cómo ahorrar luz para mejorar tu consumo energético! Aplica las medidas que creas más convenientes y convierte tu hogar en un espacio más respetuoso con el medio ambiente. Verás que haciendo estos pequeños cambios podrás ahorrar dinero y cuidar el planeta en el proceso. ¡Esperamos haberte ayudado!
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